El Día Antes

Los días anteriores al viaje a Lisboa tuve que estar en Francia. Estuve en Moissac, desde allí, para regresar el día anterior al viaje, tuve que conducir hasta Toulouse, tomar un avión Toulouse – Madrid y enlazar con un AVE Madrid – Alicante. Realmente una proeza, nadie con los que hablé creyó que podría hacerse. El avión aterrizaba a las 20:15 y el AVE salía de Atocha a las 21:05 h, escasos 50 minutos desde la pista de aterrizaje hasta el andén del AVE en Atocha. El día tampoco ayudaba, se trataba de la tarde anterior a la coronación de Felipe VI y algo del mundial. El avión aterrizó puntualmente, 15 minutos para llegar al “finger”, después de una carrera importante por toda la T4, llegue a la parada de taxis y tras un viaje alucinante Barajas – Atocha, otra carrera hasta el andén del AVE Madrid – Alicante. Realmente de vértigo, una hazaña. A las 7:00 h del día siguiente estábamos sentados en la furgoneta camino a Lisboa.

 

Una imagen del rio Tarn, afluente del Garona, tomada desde la terraza del restaurante del hotel Le Moulin de Moissac, donde cené la noche anterior.

Salvador