Brooklyn

Nueva York normalmente se identifica con Manhattan, la gran manzana, tanto es así que muchos visitantes, por falta de tiempo, se pierden el encanto de Brooklyn. Gentes de las más diversas culturas pueblan sus calles, en sus barrios, hoy renovados, hay extraordinarias librerías, galerías de arte, boutiques, locales de jazz,…

 
En el siglo pasado, muchos habitantes de Brooklyn, emigrantes sin recursos, soñaban con atravesar el puente para abrirse camino en Manhattan. Hoy el trasiego es al contrario. Los artistas, los creadores, los jóvenes salen de Manhattan, porque resulta demasiado caro, para instalarse en Brooklyn.   

 
La opción de Brooklyn gana cada vez mas adeptos porque ha dejado de ser un lugar eminentemente portuario, feudo de bandas violentas, con fábricas y almacenes sucios y viviendas sin reformar. Todo tiene su lado negativo, en la medida que se va embelleciendo este distrito y va siendo apetecible de gente con posibles, se va encareciendo y dejando de ser un sitio al alcance de muchos bolsillos.

 
Si se tiene tiempo, es aconsejable llegar caminando a Brooklyn por el puente del mismo nombre, desplazándose por su pasarela central fabricada con tablones de madera. Desde el puente, en el crepúsculo, se disfruta de la imagen mas hermosa y completa de la ciudad. 

Salvador